Capitulo 31. Maratón

El roce de algo hizo que se mirase la muñeca y para su sorpresa alrededor de su muñeca izquierda había unas esposas, las cuales la ataban a la muñeca derecha del muchacho tendido sobre la cama.

-¿Qué es esto?-preguntó empezando a asustarse.

-Unas esposas-contestó él tranquilamente.

-¿Me has esposado?

-Muy aguda, detective Tomlinson-dijo él imitándola en su forma de hablar.-Esta es mi venganza por tu jugarreta de dejarme desnudo fuera de casa.

-Pero ¡qué rencoroso!-exclamó mordiéndose el labio y moviendo la cabeza.-Y está bien, muy graciosa la bromita…-se rió irónicamente.-Ahora quítame esto.

-Mmm…-vocalizó mientras hacia que se lo pensaba.- ¡No!-contestó sonriendo.-Por lo que me has dicho, lo peor que te podría ocurrir es pasar tiempo conmigo, así que como si quieres o como si no, vas a estar un día entero pegada a mi. Y que casualidad que hoy, justo hoy, tenga mi fiesta de cumpleaños organizada por Harry en su casa. ¿No crees que es una grata coincidencia?-preguntó sarcástico.

Ella se rió falsamente mientras se sentaba en la  cama ante la imposibilidad de salir de allí, de una forma distinta que a la de pasar por encima del cuerpo de Liam.

-Vale, a ver… uno-dijo levantando el dedo índice.-Ni pienses por un segundo que voy a ir a esa fiesta. Dos,-levantó el dedo corazón.-Tu cumpleaños no es hoy, sino el viernes que viene; así que no se a cuento de qué viene esta fiesta. Y tres-levantó el dedo anular.-Ya estas tardando en quitarme estas dichosas esposas, porque te juro que como no lo hagas, te mato-hablaba tranquilamente al igual que él.

-Recuerdas el día de mi cumpleaños-dijo Liam sonriendo por la agradable sorpresa.

-No, no te equivoques-mintió.-Mi hermano esta mañana me lo ha recordado.

-¿Esta mañana dices? Que extraño, juraría recordar que llegaste a casa, saludaste y te fuiste a dormir.

-Bueno…-dijo quitándole importancia.-Quien dice esta mañana, dice la mañana de ayer.

-Pues es una pena, me había hecho ilusión que recordaras mi cumpleaños. Yo aún recuerdo mi única fiesta de cumpleaños a la que fuiste. No te había invitado pero fuiste-bromeó.

Ella sonrió irónicamente achinando los ojos.

-Fui obligada-le aclaró.-Esa noche mis padres habían salido y mi hermano tenía que cuidarme. Y a él, no se le ocurrió otra genial idea que llevarme a esa dichosa fiestecita porque decía que no quería perdérsela.

-Pues que sepas que me alegró mucho verte allí-dijo él con total sinceridad.

Ella viendo que la conversación retomaba un camino lleno de espinas y oscuridad, prefirió no hablar más de ello.

-Por supuesto, Liam, pero no trates de cambiarme de tema-dijo volviendo al tema de conversación anterior.-Mira, si no me las quieres quitar, dame las llaves que ya me las quito yo misma.

-¿Llaves?-cuestionó haciéndose el interesante.-Si, te las daría si supiera donde las tengo-dijo con su intocable sonrisa.

-Estas hoy muy gracioso-comentó irónicamente.-Pero que sepas que a mi no me hace ni pizca de gracia. ¡Quítame esto!-exclamó tratando de pasar su mano por el hueco de la esposa.

-Te vas a hacer daño-le advirtió Liam al ver lo que trataba de conseguir.

-Me da igual, todo sea por librarme de este cacharro-dijo apretando los dientes mientras seguía tratando de quitárselas.

-Pero si te encanta esta situación-dijo él riendo.-Es más te alegras de pasar un día entero conmigo-bromeó.

-Pero ¿quién te crees que eres?-preguntó achinando los ojos.- ¿Te piensas que porque tengas buen cuerpo y seas guapo, todas las mujeres van a caer rendidas a tus pies? ¡Pues no!-exclamó muy segura sacándole una sonrisa a Liam.-Que haya unas cuantas que por una sonrisa tuya estén dispuestas a bajarse las bragas, no significa que yo si. Porque a mi me interesa algo más aparte del físico, algo que se llama personalidad, algo que te falta, y mucho.

-Así que piensas que soy guapo-dijo Liam tratando de enfadarla.

-¿Qué? ¡No! O sea ¿de todo lo que te he dicho te quedas con eso? ¡Tu grado de estupidez ha ascendido al máximo!-exclamó sulfurada.

En ese momento el móvil de ____ empezó a sonar. Ambos se miraron y luego miraron hacia la dirección del bolso que había acabado en los pies de la cama. ____ al encontrarse sentada estaba más cerca pero Liam para impedirle que llegase, la agarró por su muñeca esposada y tiró de ella hasta tumbarla en la cama. ____ trató de hacer lo mismo pero no consiguió nada aparte de hacerse más daño en la muñeca porque tiró de él directamente de las esposas. Al ver su intento truncado, trató de levantarse y quitarle el móvil que ya tenía Liam en la mano que tras echar todo el contenido del bolso sobre la cama lo había encontrado.

-Pero si es Max-dijo él leyendo el nombre en la pantalla táctil del aparato.

____ intentó quitárselo pero él le puso una mano en ese espacio entre el cuello y sus pechos, volviéndola a tumbar sobre la cama. Liam jugaba con ventaja, tenía más fuerza y para su trabajo había tenido que aprender todo tipo de técnicas de autodefensa que podía poner en práctica. ____ tenía la respiración agitada; unos centímetros más abajo y la mano de Liam entraba en terreno prohibido.

Liam al ver que tenía la situación bajo control, decidió atender:

-Max, ¡amigo!

Nada más decir eso, ____ reaccionó y trató de zafarse de su mano de todas las maneras posibles.

-¿Quién es?-preguntó Max al otro lado del teléfono.

-Soy Liam, ¿te acuerdas de mí?

-Si, ¿dónde está ____?-preguntó de inmediato.

-Ella…se está duchando-contestó mirándola.

-Max, no le creas-empezó a gritar _____.

-¿Qué ha sido eso?-preguntó el novio.

-Na…nada-contestó Liam.-La tele. Estaba haciendo zapping y sin querer lo he dejado en Sálvame.

-No mientas, dile la verdad-gritó ____ nuevamente.

-Oye, Max, no es que quiera ser descortés, pero ¿para qué llamabas?

-Para hablar con mi novia-contestó haciendo hincapié en la palabra novia.

-Pues siento decirte que se está duchando. ¿Quieres que le deje algún recado?-preguntó mientras de fondo se oía a ____ gritar.

-Dile que me llame en cuanto salga de la ducha.

-De acuerdo. Adiós Max. Un placer hablar contigo-y tras eso colgó sin tan siquiera darle tiempo al otro de despedirse.-Pero que tonto no sabe ni reconocer la voz de su propia novia-dijo riendo.

____ sin decirle nada, ni contestarle al comentario que acababa de hacer, intentó quitarle el móvil pero él la esquivó.

-¡Eh!-exclamó el muchacho.- ¿Qué pretendías hacer?-preguntó volviendo a evitar que le quitase el móvil.

Ella le agarró por el brazo de la mano donde tenía el móvil y trató de arrebatárselo doblándole el brazo para así llegar hasta su objetivo. Liam viendo que lo iba a conseguir, quiso detenerla.

-Vale, vale. Está bien, te doy el móvil-dijo haciendo que ella se detuviese.-Y no es que no me guste esta situación pero cualquiera que entrase ahora mismo pensaría mal…-comentó haciendo referencia a cómo estaban.

____ para intentar quitarle el móvil se había sentado a horcajadas sobre él y sin proponérselo había agotado la distancia entre ambos. Lo que conllevaba que Liam tuviera unas vistas privilegiadas de sus pechos pero él prefería, por raro que pareciese, mirarle a la cara. Ella se quedó unos segundos mirándole en la misma posición pero dándose cuenta de que llevaba razón, se quitó de encima suya mientras le pedía por enésima vez que le devolviera el móvil. Liam queriendo ‘contentarla’, decidió devolvérselo. Cuando ____ lo agarró, intentó usarlo pero estaba apagado.

-¿Por qué no funciona? ¿Qué le has hecho?-preguntó pulsando el botón de encender/apagar.

-Esto-contestó enseñándole la batería de su móvil.

-¿Cómo te ha dado tiempo a…?-dejó la pregunta a medio terminar.

-Dudas de la vida-contestó guardándose la batería en el bolsillo de su bañador, bañador que hasta ese entonces ____ no se había dado cuenta de que lo llevaba.

Continuará...