Capitulo 26.

Diana llevaba más de media hora en el despacho del jefe cuando por fin salió. _____ y Candela creían que saldría radiante y feliz. A saber qué habrían estado haciendo durante ese tiempo. Pero fue todo lo contrario, salió malhumorada. Echando chispas y haciendo aspavientos cual loca en un manicomio. Furiosa buscó a _____ por el bar y fue hacia ella que estaba en una mesa dejando unas tapas que habían pedido.

-¡Tú!-dijo Diana al llegar a la altura de _____ apuntándola con el dedo.-No se qué demonios habrás hecho pero has conseguido lo que querías.

-¿Qué?-preguntó _____ sin entender absolutamente nada.

-No te hagas la tonta. Sabes muy bien de qué te estoy hablando. Estoy despedida porque alguien le hizo el favor al jefe de decirle que soy una incompetente y estoy segura de que ese alguien eres tú. Entre todas las de este antro, tú eres la que más envidia me tiene. Espero que estés contenta y que el trabajito que le estés haciendo al jefe te sirva para algo más que para estar a cuatro patas. Pero mira que eres gua…-Diana no pudo terminar el insulto porque ____ la calló dándole un bofetón en la cara.

-¡No vuelvas a insinuar algo así otra vez en tu vida!-exclamó llamando más la atención de todos los clientes del bar.

Diana se llevó la mano al rostro donde le habían abofeteado y miró a _____ con un odio indescriptible. Ésta empezó a sentir miedo. Acababa de pegar a una Diana enfadada, enfureciéndola aún más. Sin preámbulos, Diana se abalanzó sobre ____ de tal manera que provocó que ambas fueran a parar en el suelo. Diana se sentó sobre ella y empezó a golpearla mientras _____ trataba de taparse con sus brazos. A los segundos, la muchacha dejó de sentir el peso del cuerpo de su compañera de trabajo sobre el suyo y bajando los brazos al suelo, cerró los ojos. Le dolía la cabeza. Menudo golpe se había metido contra el suelo. Solo por lo que oía dedujo que Liam y seguramente su otro compañero habían sido los que habían detenido la pelea. Pero sus deducciones se confirmaron cuando oyó a Liam preguntarle:

-____ ¿estás bien?

Sintió una cálida mano posarse sobre su mejilla y pidiéndole un segundo con la mano, tomó aire. Abrió los ojos y se dispuso a levantarse con la ayuda que Liam le ofrecía cuando se tambaleó momentáneamente y tuvo que apoyar la mano en el suelo. Se incorporó y contestó a la pregunta de Liam con un movimiento de cabeza afirmativo. El policía viendo el jaleo que se había proclamado en el bar trató de calmar a los clientes mientras su rubio compañero sacaba a Diana de allí. _____ empezó a sentir un extraño dolor de la mano con la que se había apoyado. Al mirársela vio que tenía un cristal incrustado en la palma. Al caerse al suelo, los vasos que sostenía en la bandeja fueron a parar también en el suelo, haciéndose añicos. Entre el alboroto del bar; los clientes cuchicheando sobre lo ocurrido y a una enfadada Diana soltando improperios intentando ser calmada por Niall ya fuera del bar, hizo que el dueño del lugar saliera a ver qué pasaba. _____ se mordió el labio tratando de aguantar el dolor y sin pensárselo dos veces se quitó el cristal de la mano. Arrepintiéndose al segundo siguiente, pues de su mano empezó a brotar sangre sin parar. Liam la miró y la vio yendo apresurada a por servilletas para cubrir la herida.

-Pero, ¿qué te has hecho?-preguntó agarrándole por la muñeca de la mano herida.

-Nada-contestó empapando las servilletas de sangre.

-Tenemos que ir a un hospital-dijo él mirándola.

-¿Qué? No. Liam es solo una herida superficial. No es tan grave.

-¿Acaso ahora eres médico?-preguntó él mirándole mal.

-¿Acaso tu si?-preguntó achinando los ojos.

Él, como de costumbre, trató de calmarse para no contestarle borde y le preguntó:

-¿Tenéis algún botiquín?

-Si, en el baño hay uno.

-____, ¿se puede saber que acaba de pasar aquí?-preguntó Andrés incrédulo.

-Bueno, verá…-empezó a decir ella mientras sentía la sangre recorrer su mano.

-En cinco minutos se lo explica-dijo Liam al jefe agarrando a ____ de la muñeca y pidiéndole que lo llevase al baño para curarle la mano.

____ fue arrastrada hasta el interior del servicio de los empleados, donde una vez dentro Liam cerró la puerta y empezó a buscar el botiquín con prisa.

-Arriba-dijo ella apuntando a la parte de encima de las taquillas.

Liam lo agarró y lo dejó sobre el banco. Llevándola al lavabo, primero él se lavó las manos y después buscando una gasa del interior del botiquín, le agarró la mano y le advirtió:

-Esto te va a doler.

Tratando de ser lo más cuidadoso posible, presionó alrededor de la herida con la gasa con la intención de detener la hemorragia. Ella cerró los ojos y apretó los dientes mientras trataba de aguantar el dolor. Una vez que la sangre dejó de salir. Le metió la mano debajo del agua y agarró el jabón. Ella al ver sus intenciones empezó a negarse mientras trataba de zafarse de su agarre pero no consiguió más que soltar un quejido en el momento en que le puso el jabón.

-Liam, ¡me duele!-exclamó.

-Te dije que esto te iba a doler.

-Liam, ¡para!-se quejó.

-____ estate quieta-le pidió mientras trataba de limpiar la herida con cuidado de no hacerle más daño pero ella no dejaba de moverse.

-Estas disfrutando con esto ¿verdad?-dijo ella pegándole un puñetazo en el brazo con todas sus ganas.

-No sabes cuanto-comentó él sonriendo.

-Imbécil, idiota-empezó a insultarle.

-¡Eh!-exclamó él mirándola y consiguiendo intimidarla. Acababa de insultarlo de la única manera que le había pedido que no lo hiciera.

Liam la observó detenidamente el rostro. Tenía los ojos llorosos y se mordía el labio con fuerza mientras hacia pucherito. Se detuvo en sus labios más tiempo de lo que hubiera deseado. Le volvía loco que se mordiese el labio de esa manera. Ignorando sus pensamientos volvió su mirada hacia la herida y terminó de limpiársela.

-¿Tienes una toalla?

-Si, en mi taquilla-dijo sacando la llave de su bolsillo y entregándosela.

Éste la agarró y abrió la taquilla mientras ella se sentaba sobre la tapa del váter. Al coger la toalla, se acercó a ____ y se puso de cuclillas ante ella. Le agarró la mano herida con el paño y se la secó. Cuando creyó que ya estaba lo suficiente seca, buscó en el botiquín más gasas estériles para secarle lo que era la herida en si. Tras eso agarró un producto especial para las heridas y cuidadosamente se lo aplicó provocando que ____ soltase otro quejido. Cuando terminó totalmente de desinfectarle la herida, procedió a vendarle la mano.

-¿Desde cuando sabes tanto de curar heridas?-preguntó ella mirándole.

-Es lo mínimo que se tiene que saber para no tener que acudir al médico siempre que te hagas daño-contestó él concentrado en ponerle bien la venda.-Pero ya que lo preguntas, me lo enseñó tu hermano-dijo mirándola durante unos segundos con una sonrisa.

Continuará...